Gracias Dios mío por permitirme cambiar mi vida
Sólo tengo veinticuatro años y empecé a beber a la edad de dieciséis por curiosidad e inseguridad. Necesitaba tomar cuando salía con los amigos, era tímido sobrio y me era preciso beber para poder hablar con una mujer. Estar borracho me hacía creer que bailaba mejor, que hacía mejor las cosas y sentirme invencible. En ocasiones tuve peleas mientras estaba borracho pues por lo más mínimo sentía que me faltaban el respeto y no medía las consecuencias.
¿desea continuar leyendo?
Debes tener una suscripción a La Viña para tener el acceso completo a nuestras historias y audios.
¿Necesita ayuda con servicio al cliente?
Llame al 800-640-8781 (Español), 800-631-6025 (Inglés), 212-870-3456 (Francés)
o escriba al correo electrónico: [email protected] (Español) o [email protected] (Inglés)