Tiempo para pensar
Cuando me llevaron preso iba con mi hijo de quince años. Tuve que pagar mucho dinero para poder salir de la cárcel y no ser deportado. Pero mi Poder Superior me tenía una sorpresa guardada: soy alcohólico y enfermo mental y, con cinco años en el programa, todavía hay momentos en los que no quiero aceptar mi condición. Mis miedos aún persisten. Soy indocumentado en este país y constantemente tengo miedo a una deportación. Pero cuando andaba en actividad me creía el mejor de todos. Recién ahora empiezo a medio entender lo que es la enfermedad que traigo conmigo.
¿desea continuar leyendo?
Debes tener una suscripción a La Viña para tener el acceso completo a nuestras historias y audios.
¿Necesita ayuda con servicio al cliente?
Llame al 800-640-8781 (Español), 800-631-6025 (Inglés), 212-870-3456 (Francés)
o escriba al correo electrónico: [email protected] (Español) o [email protected] (Inglés)