La historia de Margarita

Pertenezco a una familia drogadicta y alcohólica. Mi papá era borracho y “marihuano" y abandonó a mi mamá con cuatro hijos cuando yo tenía tres años. Mi madre trabajaba en su casa, pero no sé cómo empezó a frecuentar las cantinas y se hizo borracha. Tuve siete padrastros, algunos verdaderamente abusivos. Uno de mis padrastros era muy bueno con nosotros, pero bebía mucho. Nos compraba un barril de cerveza a los del barrio, y mi hermana y yo empezamos a beber la espuma que se juntaba en la boca del barril en unas tacitas, y nadie se fijaba en lo que hacíamos. Ya a los nueve años, mis amigas del barrio y yo comprábamos botellitas de tequila. Mi hermano mayor tenía dieciséis años y él y su novia usaban heroína. Un tiempo después yo me empecé a juntar con ella, a ir a las cantinas y a usar toda clase de drogas.