Enero / Febrero 2016
Mensaje de esperanza
Su mundo se vino abajo, fue a la cárcel y no bebió
Para mí, pertenecer a un grupo de Alcohólicos Anónimos era lo peor que me podía suceder. Yo pensaba que muy pocos se merecían AA, solamente la escoria de la sociedad. Sin embargo, al igual que la mayoría de la humanidad que juzga y critica sin saber, yo no escuché esa frase que dice: “No desprecies lo que
no conoces”.
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