Mayo / Junio 2020 | AA en prisiones

Sola y vacía

A través de la recuperación, ella aprende a conocerse como nunca antes había podido

Yo nunca concebí mi vida sin el alcohol. Para mí, no había nada más gratificante que una copa de vino tinto (o dos, o tres, o más) después de un día de estrés, una cerveza (o dos, o tres, o más) en los días de calor, un buen tequila con mis amigos los fines de semana, unos cuantos shots de jagüer para comenzar a socializar.

¿desea continuar leyendo?

Debes tener una suscripción a La Viña para tener el acceso completo a nuestras historias y audios.

inicia sesión Renovar Suscríbete

¿Necesita ayuda con servicio al cliente?

Llame al 800-640-8781 (Español), 800-631-6025 (Inglés), 212-870-3456 (Francés)
o escriba al correo electrónico: [email protected] (Español) o [email protected] (Inglés)

¿tienes algo que quisieras compartir con nosotros?

¡Queremos escuchar tu historia! ¡Envíanos tu historia o foto y esta podría ser publicada en una próxima edición de la revista La Viña!

comparte aquí